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La Urología es la rama de la Medicina que estudia y trata patologías del aparato urinario en el hombre y en la mujer y el reproductor en el varón, es decir: glándula suprarrenal, riñón, uréter, vejiga, próstata, vía seminal, uretra, estructuras del suelo pelviano, pene, escroto, testículo y epidídimo
Se trata de una especialidad reconocida en la mitad del siglo XIX, cada vez más necesaria a medida que se viven más años y el número de patologías y su gravedad aumentan.
Un recurso para atender enfermedades benignas como el crecimiento de la próstata que hace que el Sr. Julián tenga que levantarse cuatro veces a orinar por la noche, interrumpiendo su sueño y el de su esposa María. O también otras más dolorosas como los cólicos de riñón.
La disfunción eréctil que conlleva un verdadero terremoto en el varón, pues altera su vida sexual y también su autoestima, Porque la urología es para el hombre como la Ginecología para la mujer.
La incontinencia de orina o las infecciones urinarias de repetición, que sin ser peligrosas, hace que mujeres de mediana edad sufran y estén preocupadas y que también el urólogo puede estudiar primero y resolver después.
Hay otras enfermedades mucho más graves como son el cáncer de vejiga, de próstata, de testículos o de riñón que precisan también de esta especialidad. Precisamente es el cáncer de próstata el que tiene una mayor incidencia entre los varones mayores de 65 años, y que ha crecido en los últimos años con una tasa de 57 por 100; un cáncer que se puede prevenir y que hoy día con los tratamientos hormonales y quirúrgicos tiene una alta tasa de curación.
Una especialidad, pues, que atiende a gran número de pacientes y que en primera instancia o para hacer el seguimiento no precisa de técnicas complejas o costosas.
Una especialidad que de establecerse en Astorga ahorraría a Mari Carmen tener que llevar a su padre a las revisiones de su cáncer de próstata, perdiendo un día de trabajo y gastando un dinero en gasolina que le cuesta mucho ganar.
Una especialidad que permitiría a Pedro, Antonio, Jesús o Mariano hacer sus revisiones de la Hipertrofia Benigna de Próstata sin tener que desplazarse al ambulatorio de León, perder la mañana y gastar la pensión que por otra parte casi no alcanza para llegar a fin de mes.
Urología debe ser uno de los servicios del Centro de Salud de Astorga porque permite una mayor accesibilidad a todos los pacientes, los de Astorga y los de las comarcas, muchos de ellos necesitados de un control más exhaustivo de su patología prostática que, siendo benigna, se puede malignizar si no se controla. Contar con esta especialidad significa un ahorro económico para los usuarios y una perdida menor de días de trabajo para los familiares y no supone un gasto para el Sistema Sanitario pues el mismo urólogo de referencia que está en León se puede desplazar a nuestra ciudad.
Tenemos un centro magnifico que costó al presupuesto de leoneses y castellanos más de ocho millones de euros. Hagámosle funcionar a pleno rendimiento.
Por Victorina Alonso Fernández.
Médica de Atención Primaria del Centro de Salud de Astorga.
