Sánchez y Ábalos maniobraron para apartar a Mañueco “trabajando” con una procuradora de Ciudadanos, según El Mundo

Una conversación por WhatsApp entre el presidente del Gobierno y el ex número dos del PSOE desvela que intentaron convencer a procuradores de Ciudadanos para apoyar la moción de censura de 2021 en Castilla y León
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y José Luis Ábalos, durante una conferencia telemática mantenida con los presidentes de las comunidades y ciudades autónomas. / Ical

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el entonces secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, estuvieron implicados en una estrategia para apartar al presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, maniobrando con una procuradora tránsfuga de Ciudadanos. Así lo publica El Mundo, que desvela nuevos mensajes de WhatsApp intercambiados entre ambos dirigentes socialistas en marzo de 2021.

Según estas informaciones, el objetivo del PSOE era atraer a varios procuradores de Ciudadanos para que abandonaran su grupo parlamentario y se sumaran al Grupo Mixto, lo que permitiría que apoyaran la moción de censura encabezada por el socialista Luis Tudanca.

A solo tres días del debate de la moción, previsto para el 22 de marzo, la procuradora de Ciudadanos por Salamanca, María Montero, anunció que abandonaba el grupo parlamentario por “falta de liderazgo” y ausencia de “regeneración” en Castilla y León.

En uno de los mensajes revelados, Ábalos escribe a Sánchez a las 16.59: “¿Te escribe Alfonso o se lo pides tú? Creo que es mejor esperar al martes cuando se sustancie la moción de CyL”. Una hora después, el presidente del Gobierno responde: “Vale. Como veáis. Pero esta semana”. A lo que Ábalos añade que aún faltaba una procuradora por dar el paso: “Nos falta una que iba a pasar al grupo mixto igual que la otra pero se echó para atrás”. E insiste: “Se está trabajando”, en referencia al intento de convencerla para que se sumara a la operación.

El PSOE necesitaba seis votos adicionales a los 35 que tenía su grupo para lograr la mayoría absoluta necesaria. Finalmente, la moción fracasó: solo consiguieron dos votos adicionales. María Montero se abstuvo, al igual que los procuradores de Unión del Pueblo Leonés (UPL) y Por Ávila.

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