Más de 200 enseñas procedentes desde todas las comarcas de la provincia de León vistieron este domingo las principales calles del casco histórico de León en el día grande de las fiestas de San Froilán. Aunque tampoco pudieron desfilar, los tradicionales carros engalanados que acompañan a los pendones permanecieron estáticos en distintos puntos de la ciudad, en los que los vecinos pudieron disfrutar de una oportunidad única para contemplarlos de cerca.
Entre los pendones que acudieron a la convocatoria de San Froilán se encontraban los de Armellada, Benamarías, Brimeda, Carrizo de la Ribera, Celada de la Vega, Castrillo de las Piedras, Ferreras de Cepeda, Fontoria, La Milla del Río, Lagunas de Somoza, San Feliz de Órbigo, Santa Marina del Sey y Sopeña y Carneros.
En concreto, los carros, que este año no estuvieron acompañados por ganado, se ubicaron en el entorno de la Catedral, la plaza Mayor, la plaza del Grano, el Palacio del Conde Luna, la plaza Don Gutierre, la plaza de San Marcelo, el Jardín del Cid, San Isidoro, la plaza de Santo Martino, Puerta Castillo y el Arco de la Cárcel. Por su parte, los pendones pudieron verse en la fachada del Ayuntamiento de San Marcelo, en la plaza Mayor, en la Catedral de León, en el entorno de San Isidoro, en el Archivo Provincial y en la Casona de Puerta Castillo.
Pese a que en esta ocasión no pudieron completar el tradicional desfile, debido a las restricciones provocadas por el COVID-19, los símbolos más característicos de la festividad de San Froilán comenzaron a desplegarse a primera hora por las calles del casco histórico. Hasta las 19 horas, vecinos y visitantes podrán acercarse a los distintos espacios emblemáticos de la ciudad donde se exponen estos elementos tradicionales.