Miñambres: «He podido entrenar a un equipo que estaba preparado para ser puntero en Tercera División»

Miguel Ángel Miñambres se despidió esta semana del Atlético Astorga y presentó su marcha al club y a la ciudad. El entrenador, que llegó a finales de la temporada 2016/17 y volvió en 2018, ha cumplido una etapa de tres temporadas con el club maragato. En esta entrevista Miñambres hace una valoración de su tiempo en la bimilenaria y sus proyectos para el futuro.

Pregunta: ¿Qué te llevas de esta experiencia de tres años con el Atlético Astorga?

Respuesta: Aunque la última etapa fueron tres años, anteriormente estuve en alguna más. De esta experiencia me llevo que he podido entrenar a un equipo que estaba preparado para ser un equipo puntero dentro de Tercera División, a diferencia de otras veces que éramos un equipo mucho más normalito. Esa situación de poder entrenar a un buen equipo, al equipo de tu ciudad, me ha resultado por un lado muy complicado, pero por otro lado muy motivador, muy apetecible.

P: En 2017 llegaste a Astorga para finalizar la temporada tras la marcha de Paulino y volviste para quedarte en 2018, ¿fue el equipo el motivo para volver?

R: Cuando llegué en 2017, era la primera vez que entraba con Sagrario, una situación en la que ellos ven que podía haber peligrado el ‘playoff’ y fue una temporada muy buena. Caímos en la tercera ronda, quedamos eliminados por la diferencia doble de los goles, pero fue un final de año muy bueno. Al año siguiente me fui al Real Ávila y posteriormente me ofrecieron volver al Astorga y hasta este momento. El Atlético Astorga, dentro de la Tercera División, es un equipo muy bien considerado y muy atractivo en mi opinión. Si a eso le sumamos que soy de Astorga y que fui jugador, me motivaba muchísimo esa pelea por volverlo a colocar en Segunda B, que igual no es la categoría que le pertece por historia, pero es el sueño y nos pareció muy bonito cuando el equipo estuvo ahí.

P: ¿Has cumplido con los objetivos que te propusiste al volver a Astorga?

R: Creo que con los objetivos sí. El equipo en estos cuatro años, aunque haya habido un año intermedio que estuve fuera, hemos jugado dos ‘playoffs’, hemos estado siempre arriba. Otro año no lo jugamos por minutos, realmente, y el año más extraño que fue el pasado, cuando se paró la liga por la pandemia. Así que creo que sí he cumplido con los objetivos, incluso por encima de lo que a veces se piensa. Pero bueno, al final la guinda, o el sueño, más que el objetivo, era lograr el ascenso, pero hemos estado muy cerca dos veces y no hemos podido.

P: ¿Cómo ha sigo gestionar al equipo en esta época de pandemia?

R: El año pasado se paró la Liga y tuvimos que volver cada uno para nuestra casa, eso fue un palo porque no nos la dejaron finalizar. Este año que sí ha habido Liga, hemos vivido, a lo largo de este proceso, lo que ha sido la pandemia para todos.

Fue muy complicado para nosotros porque somos un colectivo más o menos de 30 personas, y no podíamos cambiarnos en los vestuarios a la vez, teníamos que entrar de cinco en cinco, no podíamos darr charlas ni ver vídeos o hacer análisis en los vestuarios, teníamos que pasar una PCR cada siete días, y si daba positivo, como nos dio esta temporada, tuvimos que estar aislados durante los 14 días preceptivos. Todo eso afectaba a la preparación, al ánimo, a todo. No creo que sea nada especial a lo que vive cualquiera, excepto que nuestro trabajo se veía muy limitado por la situación de los espacios cerrados.

Se ha convertido en una temporada larguísima y durísima, lo que hemos vivido todos.

P: ¿Qué te ha hecho tomar la decisión de presentar tu dimisión?

R: Más que una dimisón es entender que considero que este ciclo tan bueno necesita fuerza para seguir en estos niveles de exigencia. Yo esa fuerza sí la tengo, pero tengo que entender, y quiero hacer entender, que hemos estado muy cerca y no hemos podido y que quizá si hay algún camio, alguien con más frescura lo podría conseguir.

Considero que los clubs están muy por encima de las personas y yo ya he tenido oportunidades. Estoy muy contento de haber estado aquí, de haberlo intentado y del cariño que he recibido. Sin embargo, todas las etapas se acaban y estoy dando un paso a un costado, no es una dimisión porque me pueda haber sentado mal algo. Es que hay que dar espacio a la gente, a mí mismo, a los demás y saber marcharse cuando la cosa está bien. Yo creo que el club está muy bien, tiene mucho futuro y quedan unas oportunidades importantes para gente que pueda venir.

P: ¿Un buen recuerdo de estos últimos años que te llevas?

R: Es muy difícil captar estos tres años en un solo momento. Quizá, para mí, podría destacar en este último año el grupo humano que hemos tenido dentro del vestuario, los jugadores. Me ha permitido desarrollar el trabajo día a día de una forma muy satisfactoria, muy feliz. Cuando diriges un grupo no es fácil, porque hay muchas personalidades, muchos egos, y este año para mí ha sido una satisfacción. Más que con momento, me quedo con el proceso que he vivido durante este año, he disfrutado y he estado muy contento aquí.

P: Por el contrario, ¿un momento difícil?

R: Los momentos difíciles suelen ir con las crisis deportivas, de resultados. Realmente, la pasada temporada tuvimos unos resultados malos que nos afectaron un poco en la convivencia interna y produce un desgaste emocional. En cuanto a momentos puntuales, aunque te he dicho que esta última temporada es buenísima y lo considero así, pero ver, en el último partido, cómo se nos iba la vida por fallar un penalti en el último minuto es muy duro. Condensas todo el trabajo en una acción muy puntual y no creo que eso sea muy justo. Salió cruz y sabemos que en el deporte estamos expuestos a eso, aún así fue un palo muy duro también.

P: ¿Volverías a hacer las cosas de la misma manera?

R: He evolucionado a lo largo de esta etapa de tres años, no hice las mismas cosas el primer año que el tercero. Creo que conseguimos renovar la plantilla que venía con mucha gente gloriosa de la época de Segunda B, pero que veíamos que quizá deberíamos cambiarla y no continuar en esa lía. Cuando miras para atrás todos, y yo el primero, ves matices que harías de otra forma. Pero no considero cosas muy grandes, cosas que si las hubiese cambiado habría cambiado absolutamente todo, no. Pueden ser matices de cosas que he visto que podrían haberse hecho de otra forma pero que no creo que hubiesen cambiado el resultado final.

P: ¿Tienes algo en mente para el futuro?

R: Dentro de este mundo del fútbol en el que estoy, ahora acaban las ligas, hay equipos que buscan nuevo entrenador… Si llega algún ofrecimiento de trabajo habrá que baremar si interesa o no. Yo voy a seguir entrenando, lo tengo claro, pero tengo que mirar si me interesa alguno de los ofrecimientos que me vienen. Si me interesan entrenaré acto seguido la próxima temporada, si no me interesan por el tema del proyecto, esperaré hasta que pueda encontrar algún sitio donde seguir desarrollando mi trabajo.

P: ¿Tienes un mensaje para los jugadores del Atlético Astorga? ¿Y para la afición?

R: Lo que, más o menos, les dije en la carta de despedida. Al vestuario, a los jugadores, puesto que convivimos todo el año, y ha sido un placer entrenarles durante este año, y también a los jugadores de los años anteriores. Han hecho un esfuerzo importante y que aquí me tienen para lo que le pueda ayudar fuera del deporte. Al resto de elementos que constituyen el club, como son los presidentes que apostaron por mí en estas distintas etapas, y en esta última Sagrario, agradecerles porque ponen todo su esfuerzo en mis manos y eso es muy de agradecer.

A la afición por supuesto, soy parte de ella. Siempre he sido socio del Atlético Astorga y entiendo sus exigencias, su cariño, cuando me lo dan. Sé que no es fácil contentar a todos, pero siempre he intentado ser honesto, pelear por el Atlético Astorga y poner todo lo que sé, mucho o poco, a favor del equipo. Agradecerles el apoyo que muchas veces me han ofrecido.