La Catedral de Astorga acogió este domingo una emotiva despedida al obispo Jesús Fernández, quien ha estado al frente de la diócesis durante casi cinco años. Con una última celebración de la eucaristía, Fernández ha dicho adiós a la que ha sido su casa antes de tomar posesión como obispo de Córdoba el próximo 24 de mayo.
El acto ha concluido con unas palabras de agradecimiento a cargo del vicario diocesano, Javier Gay, quien ha destacado la entrega y dedicación incansable del obispo durante su etapa en Astorga: “No ha habido día ni hora en la que Jesús no haya estado cerca de sus parroquias, de sus sacerdotes y de los fieles, llevando siempre un mensaje evangelizador”.
Como símbolo de su paso por la Diócesis de Astorga, Jesús Fernández ha recibido un báculo conmemorativo, un gesto que recordará su labor pastoral en Astorga mientras emprende una nueva etapa en Córdoba.