TRÁFICO

La DGT realiza una campaña de vigilancia del uso del cinturón y sistemas de retención infantil

Castilla y León registró 80 víctimas en accidentes de tráfico en 2014, de las que 25 no llevaban el cinturón puesto

Los agentes de la Dirección General de Tráfico (DGT) comprobarán durante esta semana el uso del cinturón y de los sistemas de retención infantil en carreteras. El Cuerpo también ha invitado a la Policía Local a participar en la campaña realizando controles en las vías de su competencia, dado que el uso del cinturón es menor en las vías urbanas.

Un total de 25 de las 80 víctimas de los accidentes de tráfico en Castilla y León en 2014 no llevaba el cinturón puesto. Por otro lado, uno de los dos niños fallecidos menores de 12 años en la Comunidad ese mismo año no usaba ningún dispositivo de seguridad en el momento del accidente.

La DGT también estudia implantar cámaras en las carreteras para incrementar la vigilancia, aunque de momento tan solo hay tres de prueba instaladas en la A-1, A-2 y A3, en Madrid. La idea es colocar 162 cámaras en carreteras convencionales y 108 en vías de alta ocupación, es decir, un total de 270 cámaras.

Las imágenes captadas se enviarán telemáticamente al centro Estada de León para comprobar que el ocupante circula sin el cinturón abrochado. Posteriormente se enviará el boletín de denuncia al titular del vehículo para así identificar al conductor.

Los ocupantes de los asientos delanteros emplean más el cinturón que los de los traseros. En estos últimos, un 20 por ciento no lo usa. Por otro lado, el uso del cinturón es menos común en las vías urbanas, motivo por el que el problema se localiza especialmente en las mismas.

El empleo del cinturón en estas vías varía según el tamaño de la población: en las ciudades con más de medio millón de habitantes, el 90 por ciento lo emplea; en las de menos de 100.000 habitantes, el 84 por ciento; y en los municipios de menos de 60.000, el uso oscila entre el 70 y el 80 por ciento.

El cuerpo recuerda que el cinturón de seguridad reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente. Un total de 194 de los 822 fallecidos en España en accidentes en 2014 no hacían uso de este dispositivo, es decir, casi un cuarto de los mismos.