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Astorga entregó la noche de este sábado los galardones del XXII Festival de Cine que premia cortometrajes de factura nacional. Antes del inicio de la gala, Marisa Paredes descubrió una estrella con su nombre en el “paseo de las estrellas” del cine de Astorga, junto a otros premiados de honor como han sido en ediciones anteriores Santiago Segura y Verónica Forqué.
La gala comenzó con normalidad, presentada por los periodistas Arturo y Mónica, quienes fueron los guías de la velada. Esta gala contó con los números de Bambolea producciones que homenajearon al cine mudo, Popeye y Sorolla, efemérides que festeja esta edición del Festival de cortometrajes.
Uno a uno se fueron entregando los galardones, siendo Muero por volver, de Javier Marco, la que se llevó el primer premio del jurado, compuesto este año por profesionales de la comunicación y el cine. El Premio especial del público fue para la dura temática de Maras, de Salvador Calvo, que pretende concienciar a la población acerca de los inmigrantes que huyen sobre todo de Centroamérica y que al llegar a España no tienen condición de asilo.
Otro de los cortometrajes, premiado con la Mejor Fotografía y el Mejor Guión fue Flora, de Javier Kühn, así como los dos premiados de Khuruf, al Mejor Actor para Abdelatif Hwidar, y a la Mejor Interpretación Novel para Farah Hamed. El premio a la Mejor Actriz fue para Rosario Pardo, quien repitió galardón tras haber ganado este mismo premio en 2017 y quien agradeció este reconocimiento que le permite “regresar a Astorga” y volver a llevarse vino, cecina y chocolate.
Paseo de la fama
- Primer premio: Muero por volver, de Javier Marco
- Segundo premio: Maras, de Salvador Calvo
- Premio especial del público: Maras, de Salvador Calvo
- Mejor cortometraje de Valores Sociales: Macarrones con tomate, de Javier Alba
- Mejor actriz: Rosario Pardo, por Happy Friday
- Mejor actor: Abdelatif Hwidar, por Khuruf
- Mejor interpretación novel: Farah Hamed, por Khuruf
- Mejor guión: Javier Kühn, por Flora
- Mejor cortometraje de animación: La noria, de Carlos Baena
- Mejor banda sonora: Remate & Wild Honey, por 2001 destellos en la oscuridad
- Mejor comedia: Pizza, de Iñaki Rirarte y Aitor de Kintana
- Mejor realizador de Castilla y León: Pedro del Río, por Cerraduras
- Mejor cortometraje rodado en Castilla y León: Las débiles luces lejanas, de Paolo Aguilar Boschetti
- Mejor documental: Camposanto, de Pablo Adiego Almudevar
- Mejor fotografía: Michal Babinec, por Flora
Premio de Honor
Tras los galardones, el alcalde de Astorga, Juan José Alonso Perandones, hizo entrega del Búho a Marisa Paredes, premiada de este año. “Los reconocimientos son algo precioso, pero el gran premio es trabajar en lo que a uno le gusta y que el público lo agradezco. Mi oficio es hermoso interpretando emociones unas veces tristes y otras veces alegres. A mí no hay nada que me guste más que cuando he terminado un trabajo y alguien me espera y me dicen que he hecho sentir cosas que no imaginaba. Siento la libertad que permite crear a un personaje. Sin libertad no se puede, ni se debe, vivir. En las historias que cuentan los cortometrajistas se puede ver cómo el cine puede denunciar, mostrar, decir algo… Es la vida misma. El cine y la cultura tienen la posibilidad de denunciar y de contar y de denunciar tantas veces como haga falta una situación injusta. La única manera de cambiar las cosas es denunciando”, exhortó la actriz y expresidenta de la Academia de Cine de España.
Además, Marisa Paredes reivindicó el cine español y el cine en las salas de cine. “Cualquier obra se hace para ser vista. El hecho de que las plataformas salgan con tanta fuerza es bueno, pero hay que reivindicar las salas de cine. Las películas se hacen para verlas en las salas de cine. Tenemos que hacer que los pequeños amen y aprendan cine desde el principio”. Paredes elogió la ciudad de Astorga y animó a los astorganos a seguir luchando por la cultura.
Por su parte, el alcalde de Astorga hizo memoria a los inicios del Festival de Cine y recordó al director Luis Miguel Alonso Guadalupe “un cineasta local de los que retratan la vida de la ciudad, y que pasan casi desapercibidos” pero que se atrevió a organizar este certamen de cortometrajes nacionales que cumple, en muy buen estado de salud, veintidós años de vida. El regidor también aprovechó para señalar que es la labor de las personas “que hay detrás” de la organización quienes hacen posible que salga adelante pues “Astorga es una ciudad de pocos recursos y las actividad las hacemos las personas que estamos en ella”.
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