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Cuando estaba acabando la carrera, Esteban se dio cuenta de que Dios tenía otros planes para él. Ingresó en el seminario en Madrid sabiendo que su vocación era real y este pasado mayo fue ordenado sacerdote. Con 35 años es vicario parroquial en San Benito Menni, una iglesia de Carabanchel, y fue llamado a dar misa en las fiestas de su pueblo, Castrillo de los Polvazares.
Pregunta: ¿En qué situación se encuentran las parroquias de Madrid comparadas con las de Astorga?
Respuesta: En Madrid hay más gente. De media, una parroquia tiene dos curas, algo que contrasta con lo que se ve en Astorga, donde un solo párroco lleva 20 iglesias. También en Madrid hay más gente joven y los barrios crecen continuamente. En mi seminario éramos unos 80.
P: ¿De dónde le viene la vocación?
R: Yo estudiaba otra carrera y me di cuenta de que Dios tenía otros planes para mí. Comencé en el seminario, aunque no me gustaba mucho, pero sabía que era lo que tenía que hacer. Después de 7 años, me ordenaron sacerdote el pasado mayo.
P: ¿Está perdiendo popularidad la Iglesia?
R: Está claro que la Iglesia ya no está de moda. La sociedad ya no va a misa, ahora tira para otro lado. Aun así, nunca va a desaparecer, eso dijo Dios. Además, muchas veces desde dentro no hacemos nada para atraer a los jóvenes. Es mitad y mitad
P: ¿Qué falla?
R: A la Iglesia le falta moverse. Los obispos tienen que hacer algo para incentivar las vocaciones y atraer a la gente para que poco a poco vuelva el interés. Es algo que va despacio, pero se puede conseguir.
Es muy facil de entender ..la iglesia la esta tirando abajo el primero el propio papa ..y con el dos monjas populistas como la Caran esa y otra de catalunya que poco favor le hacen a la vocacion catolica …hay muy pocos religiosos que sigan a jesucristo…que pena me da ver como se cae una de las fortalezas mentales que habia…. ahora todo es negocio.. no muy limpio…Salut
Si, es posible que desde dentro no se hagan las cosas tan bien como se debiera, pero lo que primero que falla somos nosotros, los que nos llamamos cristianos, que nos limitamos a culpar a los demás como si la cosa no fuera con cada uno. Por lo pronto, no rezamos lo suficiente (y muchas veces no rezamos nada) por los que nos dirigen, quienes tienen su apoyo en nuestras oraciones. Lo segundo es que nos limitamos a un mero cumplimiento de algunos ritos (los que nos convienen y no nos complican mucho la vida). Y para finalizar, queremos que la iglesia se acomode a nuestras debilidades. Por eso, y no por otros motivos, la Iglesia ya no está de moda.
Saludos