El invierno seco destroza los manantiales

Aunque no se lo que ocurre en otras partes de España, en el Oeste de la provincia de León, estamos teniendo un invierno muy seco. Sol durante el día y fuertes heladas durante la noche. Esto me da pie para escribir sobre un asunto que ya he tratado infinidad de veces, pero que nunca está de mas recordar. Si no hay precipitaciones no cabe esperar que las fuentes y los manantiales durante la primavera y el verano sean muy caudalosos.

Los antiguos se maravillaban al observar como en ciertas partes altas de algunas montañas había (y hay) manantiales y por ello estaba dispuestos a creer que eran aguas que provenían del mar y que por mecanismos nunca explicados (no existen) se introducían en tierra firme y ascendían hasta las fuentes de las zonas altas de los montes. Nada de esto es cierto ,aunque en principio pudiese parecer una teoría lógica.

Yo al escribir no expongo de lo que a mi entender sucede con el agua subterránea, ni con las fuentes y manantiales. Yo me limito a explicar lo que se enseña en centros de estudio e investigación de reconocido prestigio, como por ejemplo la Universidad de Salamanca  (apuntes del profesor F. Javier Sánchez San Román), el cual a su vez recoge las enseñanzas de  personajes como Bernouilli, Darcy y otros muchos investigadores de reconocida solvencia a nivel mundial y desde hace muchos años. Algunas personas en el transcurso de conversaciones coloquiales me dicen que como se busca el agua subterránea siguiendo criterios científicos. Yo les contesto que para tener una ligera idea, hace ya unos 40 años me supuso a mi durante dos cursos en la Universidad Complutense de Madrid estudiar Hidrología e Hidrogeología. A mi y por supuesto a mis compañeros de clase. Por otra parte los apuntes que entonces se nos explicaban no son sencillos de entender si antes no se tenían unos ciertos conocimientos de física, matemáticas y geología. Ver imagen que se adjunta al texto. Por tanto yo diría que es muy difícil prácticamente imposible explicar  en un corto artículo como este a cualquier persona como se busca el agua subterránea.

Lo que si digo y con toda rotundidad, es que esas arraigadas creencias sobre supuestas corrientes subterráneas de agua en las que muchas personas creen ,no existen. El agua en el subsuelo básicamente lo que hace es acumularse en los diminutos poros o fisuras que se extienden bajo el suelo por enormes extensiones de terreno. Para que el agua se acumule en esas cavidades tiene que llover y nevar y para evaluar matemáticamente el agua que puede haber en el subsuelo hay que tener datos matemáticos concretos sobre el porcentaje de huecos ( porosidad) que hay bajo el suelo.

Por otra parte para conocer los volúmenes de agua que en un período concreto de tiempo se pueden extraer del subsuelo hay que de nuevo acudir a estudios físico-matemáticos más o menos complicados. En una palabra que sólo tras análisis más o menos complejos podemos entender todo el proceso de acumulación, circulación y eventual extracción de agua del subsuelo. Todo es mucho mas complicado que esa ancestral e insisto; equivocada idea según la cual hay una serie de conductos de agua subterráneos a los que se puede conectar una tubería como la que ponen los fontaneros en una vivienda. Es repito una vez mas una idea equivocada. Otra cuestión es que dado que el agua se extiende bajo el subsuelo por zonas muy amplias un pozo o un sondeo realizados al azar tengan muchas posibilidades de hallar agua y sobre todo si son profundos o se realizan tras una época de fuertes lluvias. Otra cuestión es que una vez realizado un pozo un sondeo o una galería subterráneo el agua acumulada en el entorno de esos huecos creados de modo artificial fluya por gravedad y por la propia presión del agua hacia el hueco dando lugar a unas corrientes de agua que antes de hacerse el pozo, el sondeo o la galería o cualquier excavación en el subsuelo no existían.

El caudal que es posible extraer de un pozo dependerá del tipo de acuífero y de las características del sondeo, de la permeabilidad del terreno y del gradiente hidráulico. Estos conceptos están relacionados mediante fórmulas matemáticas concretas y lógicamente es preciso no sólo manejar correctamente esas fórmulas matemáticas. También hay que tener bien claros los conceptos señalados (permeabilidad y demás).

Po tanto y concluyo si se quiere buscar agua en el subsuelo de modo racional y científico no hay mas remedio que acudir a la realización de estudios hidrogeológicos, que pueden ser más o menos complejos (y costosos). Si no se quiere hacer esto se puede probar ha hacer un pozo “al tuntún” y a menudo también aparece agua. No obstante el agua que se puede obtener del subsuelo acaba dependiendo por norma general de la climatología. Si durante mucho tiempo ni llueve, ni nieva los manantiales e incluso los arroyos y los ríos acaban desapareciendo.

Para terminar y puesto que una imagen vale mas que mil palabras, adjunto un fragmento de unos excelentes apuntes de Hidrogeología, es decir de la rama de las Ciencias de La Tierra que se ocupa de buscar agua bajo el suelo de modo racional. Su autor es el profesor D. F. Javier Sánchez San Román de la Universidad de Salamanca. El lector que entienda o al menos le parezca entender lo que se expone en esta imagen, será sin duda alguien que esté capacitado para buscar agua subterránea de modo racional o científico. El que no cumpla estos requisitos, deberá ponerse a estudiar.

Bembibre, 5 de enero de 2018

Rogelio Meléndez Tercero.

Print Friendly, PDF & Email