El ajo une en Santa Marina del Rey tradición e innovación

Manuel Vega lleva «toda la vida» acudiendo a la centenaria Feria del Ajo de Santa Marina del Rey. Una tradición a la que este productor de Villares de Órbigo se suma con alegría cada año. «Se trata de una fiesta para la comarca y eso es siempre bueno». La localidad ribereña celebra a este producto desde el pasado 6 de julio con conciertos, magia y actividades gastronómicas. «Hoy 18 de julio, fiesta de la patrona de Santa Marina, celebramos esta feria que es un privilegio que tenemos desde finales del siglo XII. Es la Feria del Ajo más antigua de la provincia y estamos muy orgullosos por lo que el municipio se vuelca con los productores y los compradores», precisó este jueves el alcalde de la localidad, Francisco Javier Álvarez.

A los tradicionales puestos de este alimento tan saludable -que este año roan el centenar- y a los de artesanía -70 puestos- y alimentación, se recupera este año la exposición de maquinaria agrícola, recordando así la antigua venta de aperos de labranza en esta Feria. Además los amantes de las motos clásicas también podrán ver una muestra en el Salón de la Junta Vecinal. A la cita acuden este jueves productores de toda la provincia así como de la vecina Zamora. Víctor Gorgojo, de Ardón, es uno de los productores más jóvenes de la Feria, comenzó con el ajo hace cuatro años y no se pierde ni una sola Feria del Ajo de Santa Marina, «es muy buena para los productores y tendría que haber más ferias de este estilo para poder llegar directamente a los compradores».

Acompañaron esta jornada el subdelegado del Gobierno en León, Faustino Sánchez, el delegado territorial de la Junta, Guillermo García, así como el presidente saliente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo. «Se trata de una feria de raigambre histórica, por lo que es una tradición a apoyar», señaló Sánchez. Por su parte, García puntualizó lo saludable del producto y el apoyo «necesario» de las instituciones ante este «producto de nuestra tierra de lo mejorcito que hay».

Al finalizar la mañana se repartieron los premios a la ristra mejor elaborada y a la calidad, tanto en variedad de ajo morada como blanco, con 150 euros y a la mejor cabeza, con 120 euros. “La cuantía de estos premios es una forma de recompensar y poner en valor el arduo trabajo que estos productores realizan durante todo el año”, explicó el regidor de Santa Marina del Rey. Este año los ganadores fueron: Pilar Rodríguez Rodríguez, que presentó la mejor cabeza de ajo blanco y Floreció Lorenzo Corrales Premio la de ajo morado. Por su parte, María José Hernández Mociños se llevó el galardón de Calidad de Ajo morado y Tomás Caracedo Villaseco de Calidad de Ajo blanco y a la mejor ristra elaborada artísticamente de ajo blanco y morado.

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