Este jueves, el alcalde junto a varios miembros del equipo de gobierno maragato han hecho un balance de lo que ha supuesto la pandemia causada por la COVID-19 en la ciudad.
En primer lugar, el alcalde, Juan José Alonso Perandones, ha anunciado que el próximo jueves 16 de julio a las 20 horas habrá un acto de reconocimiento a una representación del personal municipal, sanitario, de las fuerzas de seguridad, Protección Civil, voluntarios y residencias, y por supuesto en recuerdo a las víctimas de coronavirus. Este homenaje no es algo solo del gobierno de la ciudad, sino de toda la corporación municipal. La idea principal, para cumplir las medidas de seguridad, es instalar una carpa en el Patio de la Ludoteca, donde se lleva a cabo el ‘Cine al aire libre’, en el caso de que no se pudiera se llevaría a cabo en el Teatro Gullón.
En cuanto al balance de la pandemia, el Consistorio la divide en dos etapas: por un lado la que estamos viviendo ahora con las medidas que se están tomando y tomarán, como la instalación del mercado en la avenida de Ponferrada, y por otro lado, la época más dura, que fue desde marzo hasta julio.
En referencia a esta última, Chayo Roig y María del Mar Castro, concejalas de Igualdad y Comercio respectivamente, han comenzado hablando de la intensa comunicación con la Policía Nacional que mantenían todos los días para estar al tanto de la situación, sobre todo en las residencias de la ciudad, ya que el propósito era contener los casos. Además toda la corporación estuvo en contacto vía Skype.
“El 14 de marzo, día que se decretó el Estado de Alarma, el Ayuntamiento de Astorga ya tenía preparado un protocolo de coordinación y voluntariado para atención no sanitaria y para paliar las eventualidades sociales que podía provocar el confinamiento en la ciudad, centrándose especialmente en las personas mayores y las que vivían solas” ha explicado Chayo Roig, quién también ha querido agradecer “la avalancha de solidaridad por parte de personas que se ofrecieron desinteresadamente como voluntarios, por ello, queremos dar las gracias a las 65 personas apuntadas”.
Han agradecido también la colaboración ciudadana a la hora de elaborar mascarillas, ya que al principio de la cuarentena el material llegaba lento, y desde sus casas hicieron una gran labor.
Las mascarillas fueron repartidas por residencias, centros de salud, colectivos vulnerables…por parte del voluntariado, además estos también estuvieron distribuyéndolas a las personas que no la portaban a las puertas de supermercados, bancos, comercios…y todas las personas que de manera telefónica las pedían, también las recibieron.
Antes de la salida de menores a la calle se entregaron mascarillas a las familias que carecían de ellas, en total se entregaron a padres y niños 227. Cuando comenzaron los paseos, el 2 de mayo, 21 voluntarios y 8 personas de Protección Civil estuvieron repartiéndolas por Astorga. En total se entregaron 7400 mascarillas quirúrgicas durante la pandemia.
En cuanto a la atención domiciliaria, se hizo un especial seguimiento de las personal mayores, se ayudó a 82 familias (218 personas) con actuaciones como bajar la basura, comprar, ir al banco…se cuidó a niños, y en algunos casos a animales, APADA se encargó de ello, ya que algunas personas tenían miedo de bajar a pasearlos. Se proporcionó ayuda psicológica (videollamadas) a mujeres que sufrían violencia de género, y hubo un intenso contacto telefónico con 86 personas mayores que vivían solas y tenían miedo por la situación que estaban viviendo. Se crearon “lazos de confianza”, así siempre iban las mismas personas a los mismos domicilios.
En un principio eran 16 familias las que necesitaban provisiones de alimentos, las habituales, y el Ayuntamiento se lo proporcionó, pero luego se sumaron 26 familias más por su situación de desempleo causada por la COVID-19. Desde el Consistorio agradecieron la colaboración del Banco de Alimentos de León, ya que fue de gran ayuda, y es que su donación de 4700 kilos de productos frescos fue fundamental. 102 familias fueron receptoras del programa de Cáritas del Ayuntamiento y del Banco de Alimentos de León. A esto se le suman 5 familias más que recibieron ayuda por encontrarse en “situación de urgencia”.
Otra de las preocupaciones del Ayuntamiento fueron los transeúntes, así, en colaboración con el cuartel de la Policía, que cedió camas, sábanas y mantas, se estableció el edificio de la Policía Local para cobijar a estas personas. En un principio fueron 6 los transeúntes que se alojaron allí y en abril llegaron a los 18.
La desinfección de las calles corrió a cargo de la Diputación, UME y un voluntario con su tractor. Además, se procedió a la desinfección de la Casa Sacerdotal y la Residencia San Francisco de Asís.
También, el Agente Tutor entregó los libros que habían quedado en los colegios a los niños de la ciudad y de los pueblos, y se provisionó de material escolar a 11 familias que carecían de él.
El alcalde ha querido recordar a los ciudadanos con estos datos, que la situación vivida ha sido muy grave, y ha pedido “que se cumplan la normas para que no vuelva a suceder algo así”.